Los empleados esperaron en la puerta del local al directivo y, en medio de empujones, exigieron una explicación. “Trabajamos 12 horas seguidas; nos paga a medias, a veces G. 1 millón, y ya estamos cansados de esta situación”, señaló el denunciante.
En el video, que los propios afectados grabaron, el dueño de la citada empresa de seguridad dice no tener miedo a la prensa y confiesa que ya lo habían denunciado.
Cuando intenta entrar a su oficina, los guardias lo estiran del brazo y le increpan. El hombre trata de explicar y argumenta el retraso diciendo que está pasando por un momento difícil.
Los empleados de la firma ya realizaron la denuncia al Ministerio de Trabajo.
Fuente: Diario Extra Digital